NAVIDAD 2009 EN TEMASCALTEPEC

Muy a pesar del frio intenso y la escasez de dinero suficiente. Por encima de la depresión en los bolsillos y la liquidación arbitraria, de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro que en Temascaltepec genera una importante derrama económica. Con todo y las pésimas noticas en la economía y en la sociedad mexicana, este fin de año, la Navidad llego con su tradicional alegría, fraternidad y reunión en esta cabecera municipal, de este pueblo encantado, Temascaltepec.
Destacaron las reuniones del personal que labora en de los Juzgados Civil y Penal de este Distrito Judicial, la que organizo la gente que labora incansablemente en el Registro Civil y la celebración alegre y bullanguera por parte de la Constructora Albarga S.A. De C.V. quienes disfrutaron de las excelencias gastronómicas del Restaurante “La Misión” de Temascaltepec, en el Rancho “El Arete”
Hubo intercambio de regalos, espontaneidad, abrazos y buenos deseos, combinados con el impecable servicio, deliciosas viandas y jaiboles únicos de este lugar, amenizadas por la música variada y por el KARAOKE que convierte en cantante, la voz mas aguda y atiplada.
Fue toda un gusto ver contenta a esta clientela que trabaja de manera incansable, en medio de la exuberante belleza de este paraje típico de Temascaltepec, de añejos sauces y encinos, del aguacate y jacaniquil; al lado del arroyo cantarín, entre las enormes peñas y laderas, junto al arbolito navideño, refrendar los buenos deseos, los cálidos abrazos y la promesa de que la impartición de justicia, la construcción de caminos o el registro preciso de nuestras vidas, serán mejores si las personas eligen y hacen siempre, lo mejor.

EL TRANSPORTE EN TEMASCALTEPEC

A pesar de ser reconocido como Pueblo Encantado del Estado de México, Temascaltepec muestra muchas deficiencias y limitaciones para ser visitado y regresar nuevamente. Una de las incomodidades que más padecen, tanto los vecinos como los turistas que se deciden a venir a esta bella población, es el transporte. Prácticamente no existen medios colectivos y el monopolio de la transportación lo tiene el taxi.
Para esta cabecera municipal, el servicio de taxis representa ante todo el grave problema del bloqueo de calles. Temascaltepec se encuentra sitiada y recortada la vialidad, que de por si consta básicamente de dos calles, empedradas, con cuestas y estrechas. Los taxis están en la entrada inaugural de Temascaltepec, reduciendo a determinadas horas del día, a un solo carril el paso de vehículos, pero es dentro del pueblo donde la vialidad se vuelve caótica, pues hay taxis formados en batería frente al Jardín del pueblo y otro buen número de estos vehículos frente del mercado.
Los taxis impiden el paso, bloquean la vialidad, y el colmo es que se detienen para subir y bajar pasaje en el único corredor que queda libre, ocasionando largas filas y la desesperación e impaciencia de los demás conductores que se atreven a cruzar por esta población.
Eso no es lo más grave, para todo el Municipio de Temascaltepec, los costos del servicio, son abusivos e inequitativos en comparación: por ejemplo, una “dejada” en la ciudad de México entre el Zócalo Capital y la terminal de autobuses en Barranca del Muerto, aproximadamente de 25 kilómetros cuesta $45 pesos, siempre de acuerdo al taxímetro; en cambio, sin instrumento de medición, un taxi en Toluca cobra entre 20 y 30 pesos cualquier servicio dentro de la periferia normal de la capital; en Tejupilco la dejada mínima esta en el orden de los $15 pesos. En cambio un servicio de taxi en Temascaltepec, a una colonia de la misma población, a una distancia no mayor a un kilómetro, cobra 30 o 40 pesos; un viaje de Tejupilco a Temascaltepec cuesta $120 pesos, en cambio uno de Temascaltepec a Tejupilco, lo quieren cobrar hasta en $200: un abuso y un atraco.
Un cliente que necesite utilizar un taxi en Temascaltepec, se expone a ser ignorado, sentirse revisado, tener que tolerar rostros de desdén, esperar que los choferes se decidan a hacer el servicio, mientras el resto de sus compañeros juegan cartas, platican, duermen en sus vehículos. Sin amabilidad, con la radio prendida a todo volumen, con advertencias, nunca jamás con disposición para ayudar a los usuarios, con sus objetos, con las puertas; sin una sonrisa o una palabra amable o de agradecimiento. Las excepciones, que las hay como en todo, confirman la regla general.
Es indispensable tomar cartas en este asunto que ocasiona cuantiosas pérdidas a los comercios del lugar. Urge enseñar a manejar a los prestadores del servicio, educarlos vialmente, enseñarles a vestir correctamente. A sentir orgullo, gusto y encanto por esta población que así recibe del Gobierno del Estado de México, esta designación que debe honrar y defenderse con el trabajo diario.