Con la maravilla del Internet tuve oportunidad de buscar cosas interesantes del Reino de Cassia y me encontré el blog de un joven mexicano de nombre Adrián, que lleva como título “La Magia del Ajedrez”. De allí reproduzco este simpático tema (creado a su vez por Fernando Pedró, metajedrez.com.ar) sobre la partida que debió jugar el trío comandado por Harry Potter, en compañía de la inteligente Harmione y el valiente Ron, en la cinta “La Piedra Filosofal”, primera de la zaga que cuenta con innumerables fans, la primera de todas, mi hija Carmen, experta en esto de la magia y hechizos encantados.
Es una curiosidad de la escena penúltima, donde se disputa necesariamente una partida de ajedrez, antes del primer enfrentamiento de Harry Potter con Voldemort, el más malo de todos los malotes. El autor trata de recrear la partida completa de ajedrez, con base en lo que se puede observar en la película, y descubre un pequeño error practico en la resolución de la partida, muy probablemente por cuestiones que atañen al ritmo de la película. Pues no se puede declarar Jaque Mate en el momento en que Harry Potter lo dice ya que aún queda una jugada de trámite, antes del desenlace final.
.Como se puede observar en el diagrama tras que las blancas capturan el peón avanzado en d6, las jugadas siguientes serian así: 1. Dxd3 Tc3! (para despejar la casilla c5 para Harry), 2. Dxc3 Ch3+ 3. Dxh3 Ac5 4. De3 Axe3. Cabe señalar que el asesor de ajedrez de la película, el Sr. Silman hace notar que la dama blanca captura tres piezas consecutivamente y asume el rol de la villana de la escena, para finalmente ser derrotada por Harry.
La Dama blanca acaba de capturar una torre en c3, y tras las jugadas ya descritas -la 1. Cf3 Dxf3 2. Ac5- se anuncia jaque mate. ¿Jaque mate? pero la dama puede regresar a e3, y aunque es cierto que la posición ya estaba más que definida, lo cierto es que aún no termina el juego. Por supuesto que el movimiento decoroso y que llenaría de honor al rival sería la declinación de su monarca tras el jaque del caballo en h3, sin embargo existen muchos aprendices que no ven más allá de sus ojos y otros contumaces que no aceptan la derrota hasta el destino final.
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